POR LAMBON

Hace algunos años cuando yo tenía unos 15, recuerdo que por casa, en el colegio y en todas partes aparecían unos amiguitos que no te podían ver comiendo algo, porque de todo querían, diablo que maldita cuerda.

En el colegio tenía que comprar dos empanadas si quería comerme una entera y no podía beberme una botella de 12oz de coca cola entera porque Robert siempre heredaba una parte.

Por mi casa un día se me ocurrió hacer algo al respecto. Una prima me dijo un día que sufría (no se si sufre todavía) de estreñimiento compraba un chocolatito que se llamaba Slash, que flojaba un paquetón.

Me estaba comiendo un Sniker y cuando vi que Bonny se acercaba me eché a la boca el último pedacito que me quedaba y la pregunta de siempre ¿Aperitivo que estás comiendo? (aperitivo era otro de los tantos nombres de infancia que tuve) Ah, unos chocolates nuevos que me trajo mi papá, ¿quieres? Son buenísimos – claro – me respondió.

Je je, le di 4 Slash y le dije que se lo comiera todos juntos. No pasaron ni 5 minutos cuando el tipo salió en bola de humo y como alma que lleva el diablo para su casa. Teníamos juego de Basketball como en una hora y cuando llegó venía caminando medio raro.

Bonny qué te pasa? le pregunté muriéndome de la risa y el me dijo mierda no se, ahora tengo una diarrea del diablo, es más tengo un tapón de papel en el trasero para no manchar el pantalón.

Ander diablo, ahí fue que me faltan tripas para reírme y todos los demás que estaban en la cancha sabían de lo que había hecho menos el. Después se lo dije y me dijo que eso no se hace y le dije, es que no puedes meterte a la boca to la mierda que te dan.

Como un mes después tenía un corito en mi casa como con dos panas y estábamos comiendo gofio casero, el caso es que al rato llega Bonny y la pregunta de siempre ¿Qué tan comiendo? Gofio respondimos todos al unísono y le pregunto quieres una taza, me dice que si. Cuando me voy para la cocina a buscarle un poco de gofio (y para que vean que no fue premeditado) entrando lo único que mi vista capto fue un frasco de ajo en polvo sobre la meseta. Que creen, se me prendió el bombillo. Le llené una taza con ajo y solo un chin de gofio.

Cuando le di la taza, entonces propuse una competencia, el que se la bajara más rápido. Pa que fue eso. El pobre casi vomita, tuvimos que darle más agua quel diablo. Le buscamos una taza con gofio de verdad y nada más dijo, coño ustedes están pasao.