Los negocios no se pueden descuidar....

Ayer pasé a eso de las 9:50PM a comerme un sandwich a Payano's de la Charles de Gaulle y andaba como mi amiga Rosa que nos juntamos en coral mall y vimos el clavo ese de Cursed "La marca de la bestia". El caso es que nos sentamos en una mesa y pasaron como 10 minutos y no se apareció ni un asarozo (como diría Hipólito) digo ni un camarero a tomar la orden.

Pues me quillé y le dije vámonos pa' Anacleto y Dorotea, ya ustedes se imaginan, de la Charles para la Gustavo entre Lope de Vega y Tiradentes (yo que después que cruzo el puente se ma hace díficil volver pal otro lado).

Parece que la suerte no estaba de mi lado ese día, pues resulta que cuando llegamos estaba todo oscuro por un apagón general (cosa rara en este país) y la planta no servía, bueno le pregunto a un chamaco que estaba sentado afuera que si estaba cerrado o no a lo que me replicó que estaba abierto. La iluminación que tenía el local era poco, pero se veía hasta bien, porque era con unas velitas (que no se si tienen nombre) que son como una tapita rellena de cera y una mecha.

Para los que ya conocen el lugar sabe que el poco de calor que imperaba en el lugar valía la pena aguantarlo para degustar los montaditos que se venden allí. A pesar de no tener electricidad el ambiente se sentía bien y paracía hasta romanticon.

Pero como el título es que los negocios hay que cuidarlos fíjense como esa noche dos ambientes diferentes, uno que tiene dos pisos, mayor tiempo en el mercado y con más personal estaba descuidado que yo si vuelvo a comprar en un Payano's sería en otra sucursal y porque no encuentre más nada y sin embargo otro que a pesar de problemas técnicos (vamos a decirlo así) se esmeraron por dar el mejor de los servicios.

Para cuando vayas por ahí anótate un número 95 y te acordarás del Mega.